El banco castellano y leonés tiene actualmente 3.202 empleados de los cuales en Madrid trabajan 415 repartidos en 60 oficinas urbanas además de los Servicios Centrales de la calle Marqués de Villamagna y calle Titán que posiblemente quedarán desmantelados.
Grupo Unicaja solo ha presentado informes desproporcionados que no compartimos sobre las causas para despedir, pero ni una sola palabra sobre un PLAN DE VIABILIDAD que vislumbre un mínimo de garantías para afrontar el FUTURO de la plantilla que finalmente se quede ofreciendo además indemnizaciones inaceptables por su baja cuantía.
Unicaja tiene una responsabilidad con su plantilla. Con un resultado de 183,8 millones en balance consolidado y uno de los mejores ratios de solvencia del sector, no puede pretender deshacerse de 1.120 personas en condiciones de auténtica miseria y absolutamente alejadas de las que se está pactando en el sector, y que esperamos no sean aceptadas por el resto de sindicatos en la mesa; máxime cuando ya en esta entidad se han vivido dos ERES anteriores.
Por ello, CCOO, como primer sindicato en el grupo Unicaja, en el Sector de Ahorro y en el Sector Financiero, exige a la dirección del grupo un cambio de postura radical en la negociación del ERE de CEISS mejorando las condiciones de salida de la plantilla y ofreciendo garantía de voluntariedad en la adscripción a las medidas.