En esta 2ª reunión previa al periodo de consultas del expediente de despido colectivo, la Empresa ha desglosado las medidas que contempla para llevar a cabo la reducción de plantilla en 1.120 personas, principalmente recolocaciones en empresas del Grupo (unas doscientas) y extinciones de contratos de las personas de más edad (comúnmente conocidas por prejubilaciones). También proponen reducir eventualmente el número de afectados mediante el ahorro de costes (recortes).
Estudiaremos con detalle sus propuestas, aunque rechazamos cualquier medida que contemple la rebaja salarial estructural o definitiva. Ya hemos visto para qué ha servido rebajar nuestros sueldos en el ERE anterior...
En cuanto al documento suscrito por el resto de Secciones Sindicales, desde CCOO manifestamos el total acuerdo con el preámbulo del documento y la mayoría de las medidas propuestas.
No obstante, no hemos valorado el documento ni nos hemos adherido al mismo en este momento porque no apreciamos de ningún modo una causa económica que justifique el expediente de despido colectivo y, consecuentemente, no valoramos realizar ninguna propuesta en tanto que la Empresa no nos demuestre la necesidad de un ajuste tan brutal, de manera razonada y en base al balance y cuenta de resultados del GRUPO UNICAJA, uno de los grupos financieros más solventes del país.
En CCOO consideramos que durante el proceso de adquisición de Banco CEISS por parte de Unicaja Banco se han sucedido multitud de sinergias y efectos beneficiosos para la matriz, Unicaja, que no han redundado en inversiones destinadas a fortalecer la viabilidad de Banco CEISS. No admitimos, en base a este hecho, el brutal ajuste de plantilla planteado para sus trabajadores y trabajadoras.
Nos preocupa profundamente el futuro de los compañeros y compañeras que saldrán como consecuencia del ERE, pero también, y mucho, el futuro de quienes se quedan, que no parece de ninguna manera asegurado.
Queremos garantías de futuro, y estas pasan necesariamente por la implicación de Unicaja en la viabilidad de su filial CEISS.
La Empresa tiene mucho interés en agilizar este periodo de negociación y el ajuste de plantilla. Nosotros confiamos en la negociación; no tenemos prisa, ni queremos que nos la metan...
Seguiremos trabajando en las sucesivas reuniones, junto con el resto de la representación de los trabajadores, en la consecución del mejor acuerdo posible.
Estudiaremos con detalle sus propuestas, aunque rechazamos cualquier medida que contemple la rebaja salarial estructural o definitiva. Ya hemos visto para qué ha servido rebajar nuestros sueldos en el ERE anterior...
En cuanto al documento suscrito por el resto de Secciones Sindicales, desde CCOO manifestamos el total acuerdo con el preámbulo del documento y la mayoría de las medidas propuestas.
No obstante, no hemos valorado el documento ni nos hemos adherido al mismo en este momento porque no apreciamos de ningún modo una causa económica que justifique el expediente de despido colectivo y, consecuentemente, no valoramos realizar ninguna propuesta en tanto que la Empresa no nos demuestre la necesidad de un ajuste tan brutal, de manera razonada y en base al balance y cuenta de resultados del GRUPO UNICAJA, uno de los grupos financieros más solventes del país.
En CCOO consideramos que durante el proceso de adquisición de Banco CEISS por parte de Unicaja Banco se han sucedido multitud de sinergias y efectos beneficiosos para la matriz, Unicaja, que no han redundado en inversiones destinadas a fortalecer la viabilidad de Banco CEISS. No admitimos, en base a este hecho, el brutal ajuste de plantilla planteado para sus trabajadores y trabajadoras.
Nos preocupa profundamente el futuro de los compañeros y compañeras que saldrán como consecuencia del ERE, pero también, y mucho, el futuro de quienes se quedan, que no parece de ninguna manera asegurado.
Queremos garantías de futuro, y estas pasan necesariamente por la implicación de Unicaja en la viabilidad de su filial CEISS.
La Empresa tiene mucho interés en agilizar este periodo de negociación y el ajuste de plantilla. Nosotros confiamos en la negociación; no tenemos prisa, ni queremos que nos la metan...
Seguiremos trabajando en las sucesivas reuniones, junto con el resto de la representación de los trabajadores, en la consecución del mejor acuerdo posible.