La fría mañana invernal de este 24 de enero ha vuelto a ser una mañana de visita a los cementerios de Carabanchel y de San Isidro, y de ahí a la plaza de Antón Martín de Madrid, que acoge el monumento de El abrazo, del pintor y escultor Juan Genovés, frente a donde estuvo el despacho delos abogados laboralistas de Atocha. Son ya 40 años recordando a los compañeros y camaradas asesinados a sangre fría en el despacho donde defendían a los trabajadores. Como cada año desde ese fatídico 24 de enero, junto al conjunto escultórico, se han depositado claveles rojos y ha resonado con fuerza la Internacional, tras las intervenciones de los representantes de las organizaciones a las que pertenecían las víctimas y de Alejandro Ruiz Huerta, presidente de la Fundación Abogados de Atocha, quien ha recordado uno por uno a Luis Javier Benavides, Francisco Javier Sauquillo, Enrique Valdevira, Serafín Holgado, Ángel Rodríguez Leal y a los heridos Miguel Sarabia, Luis Ramos, Dolores González y a él mismo.
Tras un acto de memoria viva frente al olvido, como lo ha definido Jaime Cedrún, se ha celebrado en el Auditorio Marcelino Camacho la entrega de los premios que la Fundación Abogados de Atocha otorga anualmente, y que en este 40 aniversario recayó en Juan Genovés, artista y creador de la obra El Abrazo y del conjunto escultórico de Antón Martín, y en el Colegio de Abogados de Madrid y al Consejo General de la Abogacía.