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Sintonía cajas-sindicatos para limar todas las aristas del protocolo laboral
Las centrales quieren que las salidas de los trabajadores sean 'voluntarias'
La negociación del pacto laboral en el proceso de fusión de Caja España, Caja Duero y Caja de Burgos arrancó este miércoles en Madrid. Fue a través de una "reunión informal" y de "toma de contacto" entre representantes de las entidades de ahorro y de sus secciones sindicales, que tuvo lugar en la sede de Acarl (Asociación de Cajas de Ahorros para Relaciones Laborales).
La negociación del pacto laboral en el proceso de fusión de Caja España, Caja Duero y Caja de Burgos arrancó este miércoles en Madrid. Fue a través de una "reunión informal" y de "toma de contacto" entre representantes de las entidades de ahorro y de sus secciones sindicales, que tuvo lugar en la sede de Acarl (Asociación de Cajas de Ahorros para Relaciones Laborales).
En el transcurso de ese encuentro, que se prolongó por espacio de dos horas y media y se celebró en un clima de "buena sintonía" según coincidieron fuentes de UGT, CCOO y CSICA, ambas partes manifestaron su "voluntad" para pactar todas las condiciones del protocolo laboral.
La mesa de negociación, única, se constituirá sólo a partir del 10 de noviembre si los consejos de administración de las tres cajas dan el visto bueno a la fusión. "En torno a la segunda quincena" del próximo mes, directivos y representantes de los trabajadores se sentarán formalmente a negociar, y lo harán primero con el fin de fijar un "marco laboral" para "homogeneizar" los criterios que se aplicarán al abordar la reducción del excedente de plantilla, cuantificado en 1.400 empleos en el informe redactado por KPMG y presentado por las entidades al Banco de España el lunes.
La cifra es "excesiva", según CCOO, y está "sujeta a negociación", según CSICA, que ha solicitado a los directivos de Recursos Humanos el informe de la consultora.
Raquel Sastre | Valladolid
El Mundo
