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El excedente de empleados ronda los 1.100 y la duplicidad de oficinas cae a 250
Estimaciones tras la renuncia de Caja de Burgos. Mientras KPMG ajusta el plan de negocio, los sindicatos preparan la negociación del pacto laboral
Sin bajas incentivadas. Los secciones sindicales apuestan por la fórmula de la prejubilación para reducir el volumen de las plantillas de ambas entidades.
El informe de la consultora externa KPMG anunciaba un excedente de poco más de 1.400 empleados y la duplicidad de 303 sucursales cuando las tres entidades estudiaban la viabilidad de una fusión, mientras que la renuncia de Caja de Burgos a última hora rebaja el volumen en proporción al capital humano y la implantación en el tejido social de las provincias, como barajan los sindicatos a las puertas de sentarse en la mesa de negociación con los representantes de las entidades de ahorro.
Sin bajas incentivadas. Los secciones sindicales apuestan por la fórmula de la prejubilación para reducir el volumen de las plantillas de ambas entidades
El informe de la consultora externa KPMG anunciaba un excedente de poco más de 1.400 empleados y la duplicidad de 303 sucursales cuando las tres entidades estudiaban la viabilidad de una fusión, mientras que la renuncia de Caja de Burgos a última hora rebaja el volumen en proporción al capital humano y la implantación en el tejido social de las provincias, como barajan los sindicatos a las puertas de sentarse en la mesa de negociación con los representantes de las entidades de ahorro.
De esta manera, plantean que el número definitivo bailará entre los 1.000 o 1.100 empleados y que el saldo de la duplicidad de oficinas será de 250, a expensas del nuevo estudio presentado por la consultora suiza antes del 30 de noviembre, plazo determinado por los dos socios de la fusión.
Los sindicatos defenderán la totalidad de los empleos de ambas entidades de crédito, aunque ante el imperativo de reducir o aligerar el peso de las plantillas, apuestan por la fórmula de la prejubilación, descartando la vía de las bajas incentivadas en el proceso laboral.
La constitución de la mesa de negociación es inminente, tanto que el asesor laboral de las cajas tiene previsto convocar a las partes durante la próxima semana o, a lo sumo, la última del mes.
De esta manera, la presencia (en función de la representación) de miembros de las secciones sindicales de UGT, CCOO, CSICA, UEA y CIG, y de interlocutores de las dos cajas, servirá¡ para sentar las bases del pacto social.
Desde UGT y CCOO trasladan el deseo de escuchar a todas las voces del proceso en las sucesivas reuniones, aunque UEA y CIG cuentan con una representación inferior al 10%, a diferencia del resto.
Mientras, siguen las divisiones entre UGT y CCOO, como recuerdan desde este último sindicato al subrayar que mantienen un acuerdo con el resto de organizaciones para garantizar una unidad de acción, abierta a todos, pero que todavía no ha firmado UGT, al que seguimos invitando, anuncian a este periódico desde la fuerza sindical que representa en la región Angel Hernandez.
Las cajas han priorizado el pacto laboral en el nuevo proceso, como sucedió en la anterior fase, aunque las presiones del Banco de España para cumplir plazos tras incorporar más tarde a Caja de Burgos al proceso, ralentizó el acuerdo.
ALEJANDRO R. L.
Tribuna de Salamanca