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La fusión obliga a Caja España a cerrar 137 oficinas y perder 510 trabajadores
Caja Duero tendrá que prescindir de 116 oficinas bancarias y de 340 empleos; la mesa laboral volverá a sentarse a negociar el próximo lunes día 11 en
Las cifras de la fusión entre Caja España y Caja Duero comienzan a ser ya habas contadas. Al menos, así se desprende de los datos que manejan los sindicatos que el próximo lunes día 11 retomarán la negociación en la mesa laboral que se reunirá en el Parador de Tordesillas, que a este paso va camino de convertirse en el centro neurálgico de la fusión Caja España y Caja Duero.
Las cifras de la fusión entre Caja España y Caja Duero comienzan a ser ya habas contadas. Al menos, así se desprende de los datos que manejan los sindicatos que el próximo lunes día 11 retomarán la negociación en la mesa laboral que se reunirá en el Parador de Tordesillas, que a este paso va camino de convertirse en el centro neurálgico de la fusión Caja España y Caja Duero.
137 oficinas menos y la pérdida de 510 trabajadores son los números que tendrá que afrontar la entidad leonesa para llevar a buen puerto el proceso de fusión con Caja Duero. La entidad charra, por su parte, deberá reducir en 116 el número de sus oficinas bancarias y prescindir de 340 de sus trabajadores. De esta forma, según explicó el responsable de la sección de UGT en la Caja, Aníbal Merayo, entre ambas cajas tendrán que cerrar 253 oficinas bancarias y perder 850 empleos, que en su totalidad pasarán a ser prejubilados o bajas voluntarias incentivadas, «en ningún caso habrá despido alguno», remarcó Merayo. La mesa laboral ya trabaja con una propuesta de prejubilación, por la que los empleados que se acojan a la misma percibirían el 75% de su salario bruto y de sus pluses, algo que para Aníbal Merayo es «indecente». En otros procesión de fusión, los prejubilados han llegado a cobrar hasta el 90% del salario y de los complementos, «y a eso es a lo que aspiramos», puntualizó Merayo.
En lo que tampoco están de acuerdo los sindicatos es con la indemnización propuesta inicialmente para las bajas incentivadas. «Veinte días por año trabajado hasta un máximo de 42 mensualidades es algo inaceptable», aseguró el secretario general de la sección sindical de UGT en Caja España. Hay que recordar que de no haber acuerdo laboral no habrá fusión.
f. ramos | redacción
Diario de León