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Caja España y Caja Duero inician el cierre de oficinas previo a la fusión
La segunda y tercera fase -el traslado allí donde se solapan agencias-, no será posible hasta que se autorice la unión
El último pleno ordinario de los consejos de administración de Caja España y Caja Duero tomó las primeras decisiones de trascendencia relacionadas con la próxima fusión de las dos cajas en una única entidad. 'Llámanos futuro' reza el lema colocado por Caja Duero en su página en Internet en referencia a la nueva caja, que será no solo la de mayor tamaño de Castilla y León, sino la única que conservará todos sus centros de decisión en la comunidad. Los consejeros de ambas entidades aprobaron el primer plan de cierre de oficinas. 19 en el caso de Caja Duero y 51 en el caso de Caja España.
Este plan ha comenzado a cumplirse este mismo mes de agosto y debería estar terminado en septiembre, cuando comience la segunda fase de la operación, una vez autorizado el fundido por la Junta de Castilla y León, algo que no ocurrirá al menos hasta el 26 de agosto próximo, cuando se reúna por segunda vez después de las vacaciones el Consejo de Gobierno que preside Juan Vicente Herrera, según apuntaron fuentes de la Consejería de Economía y Empleo, el departamento encargado de elaborar el informe final sobre la operación.
Coordinadas, no juntas
Caja España y Caja Duero han tomado las decisiones por separado, aunque de manera coordinada. Los consejos de administración ordinarios de finales del mes pasado dieron el visto bueno a la clausura de las agencias menos rentables, de aquellas situadas en las cercanías de otra que amplía su área de influencia. Fuentes de Caja España confirmaron ayer el comienzo del proceso y la cifra de oficinas que se cerrarán, 51, aunque el calendario en el que se llevará a cabo la totalidad de la operación no está cerrado. Sí hay fechas, esta fase, la primera, debe concluirse en septiembre. De manera que han comenzado a informar a sus clientes del cambio de oficina de atención a partir de ahora.
En el caso de Caja España, la que más agencias eliminará de su mapa de expansión, las primeras empezarán a desaparecer a partir de la semana próxima. Para el 15 de julio próximo, habrán bajado definitivamente la persiana diez oficinas, cinco en Valladolid y otras cinco en León. Así, cierra una de las oficinas de Parquesol y también la de la calle Hernando de Acuña. Sus trabajadores y sus cartera de clientes se traslada a las dependencias abiertas en la calle Adolfo Miaja de la Muela.
La caja con sede en la capital leonesa, donde permanecerá la de la futura entidad fusionada, explican que se trata de aquellas oficinas que están unas muy cerca de otras, demasiado en estos momentos de reducción de costes. A ellas, se suman otras cuya rentabilidad ha caído, o tienen pérdidas en estos momentos y algunas en las que las probabilidades de negocio resultan escasas o casi nulas. De todas formas, el núcleo de los cierres se centra en los lugares con mayor cifra de oficinas. Caja España tiene 52 oficinas abiertas en la capital vallisoletana, casi el doble que Caja Duero -que suma 28 en esta ciudad-, cuenta además con 39 en Madrid y con 32 en León.
Caja Duero, por su parte, informó el lunes a los sindicatos del comienzo inmediato de los planes de cierre, de momento de 19 oficinas, aunque de esa cantidad ya ha adelantado la clausura de 6 en España en las últimas semanas y retirará otras 13 entre agosto y septiembre, según explicaron fuentes sindicales que acudieron a la reunión. Seis de las oficinas que se cerrarán a partir de ahora están en Portugal, donde permanecerán en activo una docena de dependencias de las que después, en la fase de fusión, se cerrará otra.
Hasta 253 menos
Los planes de la caja fusionada pasan por un «redimensionamiento y racionalización de la capacidad productiva», expresión que en el caso de la red de oficinas significa que cerrarán el 23% de las 1.102 con que cuentan ambas entidades. Un total de 253 sucursales operativas ahora echarán el cierre y más de la mitad de ellas, en concreto 139, están en Castilla y León, donde quedarán abiertas 498 sucursales.
La provincia de la comunidad más afectada por la reordenación será Valladolid, donde desaparecerán 37 oficinas, seguida de Palencia (27) y León (23). En Madrid serán clausuradas 36 sucursales.
La Comunidad de Madrid será la zona con más puntos de atención al cliente, 121, una vez concluida la reordenación. Le seguirán de cerca Valladolid (119) y León (110). En Salamanca permanecerán 88 oficinas y la provincia con menor presencia de la nueva caja será Segovia, donde habrá 3 sucursales.
Entre las zonas geográficas donde la entidad de ahorro conservará más implantación física destacan Extremadura, con 69 oficinas, seis menos que ahora; y Galicia, con 32, cinco menos de los actuales. Serán significativos los recortes aplicados en comunidades como la Valenciana (se cerrarán dos y quedarán 16) y Andalucía (10 menos para dejarla en 27). También en Portugal habrá un notable ajuste de tamaño, ya que se clausurarán 7 y permanecerán abiertas 11. Las Islas Canarias serán la única comunidad sin presencia de la nueva entidad.
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