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Caja España empieza hoy el cierre de 51 oficinas sin la ratificación de la fusión
Los trabajadores acogidos al plan laboral no pueden prejubilarse todavía
Caja España comienza hoy el cierre progresivo de 51 oficinas sin que la Junta de Castilla y León haya ratificado de forma definitiva la fusión con Caja Duero. Pese a que tampoco se ha celebrado el primer consejo de administración y con la polémica del futuro presidente de la entidad abierta, ambas entidades han comenzado a clausurar oficinas propias para dar un paso más en su unión.
Caja España comienza hoy el cierre progresivo de 51 oficinas sin que la Junta de Castilla y León haya ratificado de forma definitiva la fusión con Caja Duero. Pese a que tampoco se ha celebrado el primer consejo de administración y con la polémica del futuro presidente de la entidad abierta, ambas entidades han comenzado a clausurar oficinas propias para dar un paso más en su unión.
La primera en comenzar a echar la trapa de sus sucursales ha sido Caja Duero que ya ha cerrado seis oficinas y ampliará este número a 13 más a lo largo del mes de agosto (seis en Portugal donde reducirá su presencia).
Caja España tiene previsto el cierre de 51 oficinas, pero a partir de hoy mismo se procederá a clausurar las diez primeras, cinco de ellas en Valladolid y cinco en León; una de ellas será la ubicada en la Plaza de la Regla cuyos trabajadores y clientes se desplazarán a la sucursal sita en la calle La Rúa.
Estos primeros cierres tienen como objetivo eliminar oficinas de la propia caja que se solapen por su cercanía una de otra. En otros casos, el cierre viene motivado por las escasas expectativas comerciales o por los malos resultados económicos.
La siguiente fase se producirá en el momento de aprobarse la fusión, cuando se cerrarán otras 189 sucursales de las dos cajas llegando a las 256, tal y como se prevé en el Plan de Negocio. La supresión de estas oficinas se producirá en aquellas localidades donde actualmente las dos entidades tienen presencia y sus sucursales pueden solaparse.
Los clientes de las oficinas que se extinguen han sido informados con 15 días de antelación.
Por último, según informa Radio León, los empleados de la caja siguen pendientes de que se ejecute el plan laboral. De hecho, los empleados acogidos a este plan que están expensas de prejubilarse aún no pueden hacerlo y deberán mudarse de sus oficinas aunque sea por un breve período de tiempo.
El motivo es que el plan laboral no puede llevarse a efecto hasta que la Junta ratifique la fusión, algo que esperan que se cumpla el próximo día 26 de este mes.
La Crónica de León
