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OTRO DESPIDO EN CITIBANK: UN GOTEO QUE NO CESA
La semana pasada hemos asistido a un nuevo despido en la red de oficinas. En este caso se trata de nuestra compañera Teresa de la sucursal de La Coruña.
Las razones esgrimidas por el banco son, entre otras, haber llegado algunos días tarde a la oficina, no haber cumplido con el protocolo establecido para la devolución a sus titulares de las tarjetas VISA atrapadas en el cajero automático, etc. También se hace hincapié, como viene siendo habitual, en la no consecución de objetivos en el período enero/mayo-2013, cuando realizaba tareas comerciales.
A la vista de los motivos aducidos consideramos la decisión de despedir a Teresa totalmente desproporcionada. Los motivos no pueden convencer a nadie, ni siquiera a ellos. La prueba está en que en el mismo acto de entrega de la carta de despido, el banco ofrece una cantidad indemnizatoria asumiendo la improcedencia del mismo.
El banco, una vez más, evita contemplar otro tipo de sanciones a su disposición y no duda en elegir la máxima: el despido de uno de nosotros. Tampoco pecamos de ingenuos. Sabemos que las cosas no funcionan así. La decisión del despido se toma atendiendo a fríos datos y sin tener en cuenta el grave daño personal que se puede causar. Posteriormente la decisión toma cuerpo en la carta que elabora RR. LL. en la que se incluyen diferentes ingredientes aportados desde distintos estamentos de la empresa.
Nos quieren vender que se trata de una decisión del negocio, pero todos sabemos que las decisiones las toman las personas y, en la mayoría de los casos, del entorno más próximo a la víctima.
Mención aparte merece en todo este proceso el director regional de la zona norte, Eusebio Herrero. Este compañero no solo entregó la carta de despido, algo que podemos entender esté dentro de sus responsabilidades como ejecutivo, si no que todo apunta a que intervino en la toma de decisiones.
Ahora bien, lo que nos parece inadmisible es que este mismo señor que tiene entre sus funciones despedir a los compañeros y compañeras tenga el cuajo de simultanear estas tareas con su condición de delegado de personal. Como ya comentamos en nuestra circular de 10-09-13 link. Eusebio es delegado de UGT por la sucursal de San Sebastián. A pesar de que esta situación tenga cabida en el marco legal, desde un punto de vista ético no hay por dónde cogerlo.
Compañero delegado Eusebio, no se puede ser a la vez abogado defensor y fiscal, defender los intereses de la empresa y de los trabajadores. En tu caso no cabe duda de que has elegido claramente el bando. Desde COMFIA-CC.OO. te pedimos que demuestres un mínimo de coherencia y dignidad y renuncies a tu acta de delegado. ¿O acaso crees que la plantilla de la oficina de San Sebastián te eligió para que despidieras a sus compañeros y compañeras?
Volvemos a repetir que no tenemos nada en contra de la sección sindical de UGT, pero sí tenemos la obligación de denunciar públicamente una situación que nos parece absolutamente inadmisible. Esperamos una reflexión por parte de los compañeros de UGT y que tomen las medidas necesarias para que esto no vuelva a ocurrir.
Otra consecuencia directa del despido es la situación en que queda la sucursal de
Desde COMFIA-CC.OO. no nos cansaremos de reclamar a la empresa que opte por otras medidas no traumáticas como las prejubilaciones. El despido no debería ser una opción, al menos hasta haber agotado el resto de posibilidades. Por desgracia, todos somos testigos de que
Citibank alardea de ser una empresa responsable que se preocupa por el impacto que pueda causar en las sociedades donde opera.
Seguiremos trabajando, seguiremos informando.
12 de noviembre de 2013
