1. Respeto de las condiciones laborales y reconocimiento de los convenios sectoriales en cada una de las actividades que realiza la empresa.
Teniendo claro este objetivo, se deberá negociar una convergencia salarial durante la vigencia del convenio (que parte de un mínimo del 20% de la diferencia en 2017) hasta alcanzar los salarios de cada convenio sectorial, entendiendo como tales el salario base, pagas extraordinarias y complementos salariales.
2. La realización de un encuadre sectorial de todas las actividades, lugares y centros de trabajo de la empresa para abordar y resolver los posibles conflictos de vacío de cobertura que muchas de las empresas multiservicios alegan para evitar la aplicación de convenios sectoriales concretos.
3. Dotarnos de una Comisión Paritaria, potente y con recursos suficientes para: realizar el citado encuadre sectorial, un efectivo control en el cumplimiento del convenio y recibir toda la información necesaria para poder llegar a todos los centros de trabajo de la empresa y así poder velar también por la defensa de los derechos de la plantilla.
4. El convenio establece un incremento acumulado en los años de vigencia de un 13,1%. El mayor esfuerzo se realiza en el 2017 con un incremento de entre un 9% para el nivel más bajo y un 5,7% para el más alto.
El convenio tiene una vigencia de cuatro años (2016-2019), teniendo en cuenta que han pasado casi dos años desde que se iniciaron las conversaciones con la empresa. Además se reduce la jornada anual máxima a 1810 horas durante la vigencia del convenio (respetando y adaptando las jornadas sectoriales inferiores), se mejoran algunos permisos respecto a la regulación del Estatuto de los Trabajadores y se incluye un Seguro Colectivo de 16.500? por muerte e incapacidad.
Desde CCOO valoramos positivamente la firma de este convenio ya que reconoce la aplicación de los convenios sectoriales frente a la prioridad aplicativa en materia salarial del convenio de empresa, combatiendo así la Reforma Laboral. Esperamos que sea el principio de un cambio de rumbo en lo que respecta a las empresas multiservicios, demostrando que siguiendo esta vía de negociación y en el formato de este convenio.
Entendemos el convenio de empresa como una herramienta de mejora y no un instrumento de precarización, tal y como muchas de estas empresas lo vienen utilizando desde la última reforma laboral. Debe reforzarse la idea de que sólo mediante el diálogo y la buena fe para negociar se puede construir un buen modelo contractual. Con trabajo precario tan sólo se construyen tejidos precarios en los que a medio y largo plazo surge el conflicto.
Confiamos también en que la iniciativa legislativa sobre subcontratación aborde debidamente la problemática existente y aporte soluciones normativas a estas fórmulas de explotación y precarización del mercado laboral.
Mientras tanto, seguiremos buscando alternativas para regular las condiciones laborales de estas plantillas aportando soluciones por la vía de la negociación colectiva y cuando no sea posible, la movilización y judicializando o denunciando los abusos.