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BBVA quiere despedir 3.800 personas.
Este excedente, que representa el 16% de la plantilla del Banco, afectaría a 3.000 personas de la red de oficinas (más de un 21% de las personas que actualmente trabajan en ella) y las 800 restantes de servicios centrales (5% del total actual).
Se proponen cerrar 530 oficinas, distribuidas así por direcciones territoriales:
Canarias | 14 |
Catalunya | 204 |
Centro (Madrid, Castilla La Mancha) | 101 |
Este (País Valencià, Illes Balears, Murcia) | 35 |
Noroeste (Galicia, Asturias, Castilla y León) | 59 |
Norte (Euskadi, Cantabria, Navarra, La Rioja, Aragón) | 41 |
Sur (Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla) | 76 |
CCOO creemos que se trata de unas cifras y un planteamiento de salida insostenible y escandaloso, que se aleja de todo aquello que el Banco ha querido hacer creer a la plantilla. Detrás de estos números hay personas y sus familias, que se van a quedar sin fuente de ingresos mientras la alta dirección mantiene e incrementa unos sueldos millonarios, como ya denunciamos en la última Junta General de Accionistas y que no se corresponden con la gravedad de la situación.
Este planteamiento por parte de BBVA nos lleva al camino de la movilización.