Los
trabajadores del Banco CEISS han iniciado este jueves y viernes su calendario
de movilizaciones con el fin de advertir a la parte empresarial de su
disconformidad con los 'recortes' apuntados dentro del plan de
reestructuración, que supondrán 1.502 despidos y el cierre de 263 sucursales en
todo el país.
Ante la situación en la que se ha visto inmersa la plantilla de Banco CEISS y tras varias reuniones sin éxito con la Dirección, la respuesta de los empleados ha sido contundente. A las doce del mediodía la totalidad de la plantilla en Aragón se ha concentrado a las puertas de las diferentes oficinas y durante 15 minutos se han cerrado las puertas a los clientes.
Para COMFIA-CC.OO. los paros parciales iniciados esta semana son el paso indispensable y necesario antes de las jornadas de huelga del lunes y martes de la semana próxima, entendiendo que su éxito puede ayudar a desbloquear la negociación.
Los propios trabajadores han iniciado una campaña informativa a los clientes, que desconocen el próximo cierre de las quince oficinas que integran la red de las antiguas Caja España y Caja Duero en Aragón. Este plan de restructuración pretende dejar sin oficinas de atención personalizada a la totalidad de los clientes aragoneses de Banco CEISS.