Confiamos en que la entidad se avenga a negociar, pero si no fuera así, necesitaremos de la implicación de la plantilla secundando paros parciales con la mirada puesta en una posible huelga coincidiendo con la celebración de la próxima Junta General Ordinaria de Unicaja.
El próximo jueves 26 de enero, volveremos a la calle a exigir nuestros derechos y el respeto a una plantilla que no merece el trato que la Liberbankarización de Unicaja les está deparando.
CON LOS BENEFICIOS OBTENIDOS GRACIAS AL ESFUERZO DE LA PLANTILLA, UNICAJA DEBE ACCEDER A NUESTRAS PETICIONES