Archivado en Socio Economico, Sector Financiero, Condiciones de trabajo

Circular CCOO en Grupo Banco Popular
enero 2016

La Autoridad Bancaria Europea -ABE- desaconseja la colocación de productos a cambio de incentivos o salario variable para la plantilla


El éxito comercial en la red de oficinas va indisolublemente unido a la confianza que tiene la clientela en sus empleados y empleadas. Lamentablemente, las malas prácticas que han llevado a cabo algunas entidades -venta de preferentes, colocación de acciones...- se han llevado por delante nuestro principal activo: la credibilidad. Y así lo entiende la Autoridad Bancaria Europea, que está elaborando pautas para fomentar la confianza en el sector financiero y que serán de obligado cumplimiento a partir de enero de 2017.

Este artículo se publicó originalmente en Popular (Sección Sindical Grupo Banco Popular) ,

El dinero es miedoso, suele decirse. Y efectivamente, lo es. Y cuando, a nivel sectorial, se le han dado motivos para perder la confianza, no es sencillo recobrarla. Conseguirlo es una labor muy complicada a la que, día a día, se aplican los miles de trabajadores y trabajadoras del sector. La relación que mantenían los clientes con nosotros ha cambiado mucho. Ha quedado muy lejos ese tiempo en el que la opinión del empleado/ a de banca era tenida en cuenta por la clientela; en el que nuestra atención y buen trato era uno de los principales motivos para vincularse a una u otra entidad financiera. Ahora todo es cuestión de precio...

 

 

Hasta la Autoridad Bancaria Europea echa un capote a la plantilla del sector, al subrayar que

"ha sufrido una injusta presión para vender productos de forma inadecuada, bajo la amenaza de acciones disciplinarias o degradación laboral, y por tener una excesiva dependencia sobre el bonus como principal fuente de ingresos"

El objetivo de la EBA es que se alineen los incentivos de los empleados y los intereses de los clientes, en beneficio de estos últimos.

 

Pero nuestros directivos parecen no enterarse. La que sí se entera es la Autoridad Bancaria Europea que "desaconseja expresamente determinadas prácticas, que califica de indeseables, como que los bancos organicen competiciones entre los empleados para que superen determinados umbrales de venta para obtener premios" La ABE ignora que en la mayoría de los casos no se trata de recibir un premio, sino de no ser abroncado por el Director Regional o Territorial de turno.

 

Estrenado el nuevo año, esperamos que el Popular vaya tomando nota de la opinión de la Autoridad Bancaria Europea y modifique los rasgos de su política comercial basados en la presión indiscriminada (*), la exigencia de objetivos comerciales incumplibles, y en los excesivos controles que a diario tienen que someterse las oficinas con respecto a las ventas realizadas.

 

(*) Frases tristemente frecuentes en este ambiente de atosigamiento: "Si no eres capaz de vender habrá que buscar quien lo haga", "Si no se cumplen los objetivos sobran empleados", "Esto es lo que hay"...

 

 

18 de enero 2016