En 2020, GSS Line obligó a su plantilla a facilitar correos electrónicos personales para acceder al uso de herramientas de la empresa y para comunicarse con las personas que teletrabajaban.
En marzo de 2021, desde CCOO iniciamos una acción judicial a la que se sumó otro sindicato, que también presentó demanda y, posteriormente, se adhirieron el resto de los sindicatos.
Como no podía ser de otra manera, la Audiencia Nacional nos dio la razón, pero la empresa recurrió su sentencia.
Ya os podemos comunicar que el recurso ha sido rechazado por el Tribunal Supremo tras 4 años de reclamaciones.
La normativa laboral obliga a las empresas a facilitar todos los medios necesarios para poder trabajar, por lo que no puede exigir el uso de correos personales.
Por lo tanto:
- Las empresas no pueden pedir el uso del correo electrónico personal en determinadas actuaciones u operativas de la relación laboral,
- Deben facilitar cuenta de correo corporativo en cuanto medio necesario para la actividad.
- La empresa debe poner a disposición de la Representación Legal de las personas Trabajadoras los elementos precisos para su actividad representativa incluidos los correos corporativos ya implantados.
Esta sentencia es aplicable a todas las empresas e implica que cualquier herramienta y comunicación laboral deben funcionar sin necesidad de correos personales. De necesitarlos, la empresa debe facilitar correos corporativos y ponerlos en conocimiento de la Representación Legal de las Personas Trabajadoras.
